Poesía para vivir. Nos presenta semblanzas de un tiempo joven. Cuando leo lo siento mío, como buenos hijos de nuestro tiempo siempre seremos jóvenes. Hemos visto llegar para quedarse las costumbres de la modernidad, se modifican y continúan.
«Se les llamaba hippies y hacían honor a la etimología de la palabra. Hip se usaba en la jerga de los negros y significaba algo así como colocado; era el estado en que los dejaba la marihuana o el ácido. Se extendió, después, para estos nuevos profetas de la modernidad que aparecieron en los sesenta y, de alguna manera, la palabra los acabó poseyendo«.
Todo cuanto presenta Juan Francisco en su página nos da buenas memoria. Un cronista magnífico.
(Museo de Boston) 1927 Edward Hopper-Drug store- En Greenwich N.Y.
Ayer y hoy del nº184 de Waverly Place Village
VII
ROCK Y DROGAS
Por supuesto, en esa lucha por experimentar con lo que ofrecían los tiempos, hubo que pagar un doloroso peaje que en su forma más auténtica acabó con aquel sueño de libertad, con la esperanza de haber hecho un mundo mejor. Las drogas mandaron al traste el espejismo que inundó el planeta de flores y cánticos alegres a la luz de las hogueras. Con aquel regalo envenenado se perdió, quizás, la oportunidad de haber hecho del hombre un ser más libre en una sociedad más justa.
Quien te mal faz mostrando grand pesar
guisa como te puedas dél guardar
Don Juan Manuel (El conde Lucanor)
Cuentan que por aquellos años se fabricaba un excelente L.S.D. en las, no lo olvidemos, factorías legales del químico Owsley Stanley, un hombre…